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Prevenir riesgos para la salud a partir del nivel de oxígeno en el aire

La Universidad de Alicante cree que sería necesaria la implantación en la región mediterránea de sistemas de alerta temprana a los cambios de oxígeno en el aire ante los riesgos sanitarios para personas sensibles por causas pulmonares, vasculares o cardíacas.
Un estudio sobre densidad del oxígeno e ingresos hospitalarios en Alicante realizado por Jorge Olcina, catedrático de Geografía, y David Martín, investigador de doctorado, ambos de la UA, y publicado recientemente en el boletín de la Asociación de Geógrafos Españoles, concluye destacando la importancia de prever la variación de volumen de oxígeno en aire por exceso o por defecto. Indican que «ello puede contribuir a minimizar los impactos de estos cambios ambientales a las personas incluidas en grupos de riesgo», susceptibles de padecer enfermedad cardiovascular o con patologías del aparato respiratorio.
Los investigadores, que también basan su estudio en las previsiones actuales acerca del cambio climático y la tendencia al envejecimiento de la población, han utilizado tanto datos atmosféricos medios como de determinados episodios meteorológicos con efecto sobre los índices de oxígeno.
El descenso acumulado del volumen de este gas en aire en varias jornadas consecutivas pone a prueba el organismo humano, pudiendo producir impactos en la salud. Así, los autores revelan que un porcentaje elevado (70 por ciento) de los ingresos hospitalarios por accidentes vasculares cerebrales y enfermedades cardiovasculares, coinciden con situaciones en las que se produce un descenso acumulado negativo del índice de oxígeno. Señalan asimismo el papel importante que juega el contraste de masas de aire en corto intervalo de tiempo, esto es, el juego de situaciones que pueden provocar hiperoxia (exceso de oxígeno) e hipoxia (déficit) en pocos días.
Indican que la evolución del contenido de oxígeno en la atmósfera a la largo del año en la ciudad de Alicante adquiere una disposición en forma de «V» con máximos en los primeros y últimos meses del año, mientras que los meses centrales, sobre todo estivales, presentan los mínimos anuales. Los valores extremos para la ciudad de Alicante oscilan entre los 295 y los 260 gramos por metro cúbico.
Destacan asimismo los autores de este estudio que las enfermedades cardiacas muestran una estacionalidad marcada, Durante los tres primeros y los tres últimos meses del año registran el mayor número de ingresos, coincidiendo con los meses más fríos. Añaden que los accidentes vasculo-cerebrales muestran también estacionalidad de los ingresos en el invierno, aunque presentan impactos en época estival, afectando más a mujeres que a hombres.
Recuerdan también que los sistemas de alerta temprana sobre densidad de oxígeno a las poblaciones funcionan ya en algunas regiones del mundo y son de fácil aplicación por las administraciones.
Fuente: UA