Un equipo de investigadores de la Facultad de Bellas Artes de la Universitat Politècnica de València (UPV), en colaboración con el grupo La Sucursal, ha creado un nuevo modelo de pantalla de protección facial, especialmente ideada para el sector de la restauración, tanto para cocina como para sala. Se llama Safe Smile y se dirige a jefes de sala, sumillers, chefs y personal de cocina.
Tal y como apunta Javier Andrés, director gastronómico del grupo La Sucursal y Premio Nacional de Gastronomía, “estamos en una situación totalmente inédita, que ha cambiado nuestras dinámicas, un escenario que hace necesarias mayores medidas de protección en el sector de la hostelería. Y a ello responde este producto, surgido de la colaboración con la UPV”.
Andrés destaca que es la primera vez que se trasladarán a sala estas medidas de higiene, “una oportunidad para seguir mejorando las medidas de seguridad alimentaria. La sonrisa de un profesional de sala es fundamental en el desempeño de su trabajo, no debemos ocultarla. Esta es la filosofía con la que nació Safe Smile”, añade el director gastronómico del grupo La Sucursal.
En este sentido, Dolores Furió, investigadora del Departamento de Escultura y profesora de la Facultad de Bellas Artes de la UPV, destaca cómo Safe Smile permite visualizar la expresión del rostro, “lo que ayuda a normalizar el trato con los clientes, haciendo que éstos, además de seguros, se sientan cómodos en esta nueva normalidad de convivencia con la COVID-19”.
El diseño de la pantalla es del diseñador industrial, Rafa Ortega. “La premisa fundamental era dar con un producto 100% seguro, liviano; que quien utilice esta pantalla se olvide de que la lleva, reforzando así la complicidad con el cliente.”, explica Rafa Ortega.
Así, la pantalla Safe Smile destaca por su ergonomía, es muy ligera y cómoda y no se empaña. Además, tiene un doble uso: por un lado, sirve de protección buconasal y, por otro, con un simple movimiento (sin tener que tocar la cara), permite cambiar la posición de protección hacia la zona nasal y ocular a modo de visera.
La fabricación corre a cargo de Rubén Tortosa, investigador del Departamento de Dibujo y profesor de la Facultad de Bellas Artes de la UPV. Se imprimen con impresoras 3D open source, de extrusión, denominadas FDM y, como materia prima, utiliza PLA, un material derivado de materias primas naturales y renovables al 100%, como el maíz, la remolacha, el trigo y otros productos ricos en almidón.
“El espíritu de este proyecto no es sólo el desarrollo y la fabricación de un producto por encargo. Pretende, además, plantear un nuevo sistema de fabricación personalizado, a través de la utilización de las impresoras 3D, en el que se tiene en cuenta la ecología, la economía circular y la economía naranja”, apuntan Rubén Tortosa y Javier Andrés.
El producto se ha desarrollado bajo la supervisión de People Are Science, empresa de consultoría científica en los sectores de alimentación, salud y medio ambiente, dirigida por Rosa Valenzuela. Esta empresa valenciana es la responsable del procedimiento técnico y de seguridad para su certificación.
Safe Smile ya se encuentra disponible para el sector de la restauración local y nacional.
Fuente: UPV