Mobionrural tiene un objetivo: conocer las características de la movilidad rural basada en el vehículo privado, desde qué la motiva a la intensidad de los flujos o el número de ocupantes en cada trayecto para, a partir de aquí, mejorar las opciones de transporte de la población rural mediante fórmulas colaborativas o a demanda y avanzar hacia una movilidad sin huella de carbono.
La sala de exposiciones del Ayuntamiento de Atzeneta ha acogido la presentación de este proyecto con sello de la Universitat Jaume I de Castelló (UJI) para diversificar y optimizar los desplazamientos en zonas rurales, que se complementará con jornadas informativas a la población de los municipios implicados los días 26 y 27 de julio para divulgar la aplicación móvil sobre la que pivota el estudio. Desarrollado por los grupos de investigación DESiRES y SOLICOM, Mobionrural cuenta con el apoyo de la Dirección General de Desarrollo Rural de la Generalitat Valenciana.
«La movilidad es clave para el desarrollo rural; una pieza básica que, bien formulada y planificada, puede actuar como palanca de cambio para revertir el proceso de despoblación o todo lo contrario: ser un freno a la hora de atraer habitantes a los entornos rurales si no se vertebra correctamente», ha explicado Vicent Querol, profesor de la Jaume I y coordinador de Mobionrural . «Sobre esta idea hemos desarrollado este proyecto pionero que iniciaremos en estas cuatro poblaciones de la Mancomunidad del Penyagolosa, Atzeneta, Benafigos, Chodos y Vistabella, y que queremos extrapolar en un futuro a la provincia de Valencia», ha añadido por su parte el también profesor y coordinador de la iniciativa, Xavier Ginés.
Quienes habitan en el interior tienen «más necesidades de desplazarse que quienes lo hacen en entornos urbanos», pero además se encuentran con «una deficitaria o nula oferta de transporte público compatible con horarios laborales o escolares», apostilla Ginés. Esto, sumado a la baja densidad de población y la dispersión de servicios, hace que el uso «del vehículo privado sea muchas veces la única alternativa, y que no siempre se aproveche al máximo, presentando un escenario de futuro para la ruralidad poco esperanzador desde el punto de vista ambiental, y por eso nos hemos puesto a buscar soluciones».
Es aquí cuando nace Mobionrural, que plasma, inciden sus promotores, «toda una apuesta tecnológica en el marco de la ruralidad» y lo que se conoce como «ciencia ciudadana», porque requiere de la implicación de la sociedad civil para, a partir de la aportación de datos sobre sus desplazamientos, ir trazando alternativas para la movilidad rural.
La puesta en servicio de la aplicación móvil se prevé para el 26 de julio y podrá descargarse en este enlace. «Es fundamental la implicación ciudadana para que el estudio funcione, y por eso llevaremos a cabo de manera previa a su activación una intensa campaña informativa», ha apuntado Ginés, que estima que durante la primera semana de agosto pueda disponerse de los primeros resultados de la parte empírica.
En este sentido, Miquel Pérez y Pablo Boronat, de SOLICOM, han recordado que tanto la aplicación móvil como los resultados del trabajo serán publicados en abierto para que puedan ser aprovechados por la población en general. Además, en concreto, la aplicación está desarrollada en código abierto de forma que pueda ser adaptada a cada contexto.
El manejo de la app es sencillo. La persona usuaria tendrá que pulsar «Inicio de desplazamiento» cada vez que emprenda un viaje, y hacer lo mismo con la opción «Fin de trayecto» cuando llegue a destino. Si no se pulsa la opción al acabar la ruta, el programa se desactiva si en un minuto no ha habido movimiento relevante. Mientras se hace el desplazamiento, el programa envía la posición al servidor cada 10 segundos. Esto permite disponer de datos precisos con los que poder establecer rutas frecuentes e intensidad de uso del vehículo, entre otros.
Para el director general de Desarrollo Rural de la Conselleria de Agricultura y Transición Ecológica, David Torres, Mobionrural profundiza en la apuesta por el impulso de políticas y acciones que contribuyan al desarrollo de las zonas rurales. Torres ha valorado durante el acto de presentación la activación de herramientas que conjugan la dinamización del territorio rural desde alternativas sostenibles de movilidad. Ha señalado la oportunidad de la digitalización y el big data para ofrecer servicios adaptados al medio rural que permiten «acertar en el diagnóstico para dar una respuesta eficaz capaz de revertir los desequilibrios que la despoblación genera en las zonas rurales». Este instrumento de ciencia aplicada ha contado con un apoyo de la Conselleria de 20.000 euros.
Fuente: UJI