La Universitat de València (UV) presenta L’experiment com a obra d’art, una nueva exposición para celebrar el 125 aniversario de sus estudios de Química, que podrá visitarse del 17 de diciembre al 02 de mayo en el Palau de Cerveró de la Universitat de València. Si el pasado mes de octubre, la Universitat conmemoró esta efeméride a través de la inauguración en el Centre Cultural La Nau de la exposición Cercant la pedra filosofal: del mite a la utopia, una muestra que analiza libros de la química, ahora los protagonistas son los instrumentos científicos y su valor como piezas artísticas, estéticas y patrimoniales. El aniversario concluirá con una tercera exposición interactiva, que se inaugurará a lo largo de 2021, sobre el papel de la química en la sociedad, que tratará de mostrar su utilidad y desmitificar las fobias que rodean a esta ciencia.
Comisariada por los profesores de la Universitat de València Josep Simón y José Ramón Bertomeu, la exposición ha sido organizada y producida por el Vicerectorat de Cultura i Esport, el Institut Interuniversitari López Piñero, con sede en el Palau Cerveró, y la Facultat de Química de la Universitat de València. La exposición se ha presentado esta mañana en el Palau de Cerveró en una rueda de prensa que ha contado con las intervenciones de la rectora de la Universitat de València, María Vicenta Mestre; la decana de la Facultad de Química, Adela Mauri, y los comisarios.
L’experiment com a obra d’art. 125 anys creant química en la Universitat de València presenta una selección de instrumentos, libros e imágenes vinculadas a la antigua Facultat de Ciències de la Universitat de València y, en particular, de sus estudios de Química. Sigue el formato de una exposición canónica de arte, pero subvierte las expectativas del público mediante la sustitución de las piezas ordinarias del expositor artístico (pinturas, esculturas, grabados), por instrumentos científicos, máquinas, tecnologías, así como por representaciones visuales producidas por estos objetos en sus actos de servicio a la ciencia. La exposición incluye también una gran variedad de libros de química de los siglos XIX y XX, que pertenecen a la biblioteca Vicent Peset-Llorca, gracias a la colaboración de su directora, Pilar Agulló.
En su intervención la rectora ha destacado la ilusión con la que hace 125 años se creó la Facultad de Ciencias donde se iniciaron los estudios de Química en la ciudad de Valencia y, agradeciendo el esfuerzo del personal docente e investigador y del personal técnico y de administración ha remarcado el actual compromiso de las personas en la ciencia y el conocimiento, la innovación y la internacionalización. Y, por último, en el contexto de las exposiciones que celebran el 125 aniversario de la Facultad, la rectora ha destacado la importancia del patrimonio atesorado a lo largo de los siglos por la Universitat de Valencia, que ”hay que preservar, poner el valor, estudiar y mostrar, al mismo tiempo que engrandecer como legado a las siguientes generaciones”.
Un recorrido por 25 instrumentos científicos del día a día con valor estético
La exposición recupera el estatus que merecen las creaciones de la Facultat de Ciències dentro del contexto artístico-expositivo y lo hace presentando una selección de 25 instrumentos científicos que se han reunido a lo largo de estos 125 años y que, en su mayoría, estudian los fenómenos ópticos a diario. Es un homenaje a aquellas personas que han pensado la ciencia y la tecnología desde el universo de las humanidades y de las artes, para restituir estas prácticas de producción de saber dentro de sus significados culturales, sociales y políticos. La muestra pretende evidenciar así la fragilidad de estas producciones visuales y materiales que, como otras creaciones científicas y artísticas, precisan de los cuidados constantes de manos invisibles para sobrevivir al olvido.
En la exposición, según explican los comisarios, el público podrá admirar las formas y substancias de la luz, la gravedad, la acidez, el color o la concentración química, materializados y esculpidos en artefactos que fueron vanguardia en su oficio científico, técnico, estético y ético. Fueron técnicas que contribuyeron a definir rasgos de la cultura mediante intervenciones en el orden de la naturaleza y en el orden social. Se trata –puntualizan ambos- de espectrofotómetros, balanzas, polarímetros, refractómetros, pirómetros, colorímetros, espectroscopios, etc. con formas y materiales que desacralizan el canon artístico para integrarlo en el entorno social de la ciudad post-industrial y la cultura visual de la sociedad actual. Algunos –siguiendo a sus comisarios-, son auténticos “teoremas hipostasiados” porque sus diseños revelan, al menos para ojos expertos, según aclaran, las leyes físicas en que se fundamentan. Otros, por el contrario, son ejemplos de “cajas negras” porque mantienen ocultas las condiciones de su funcionamiento y su fiabilidad se asienta en las industrias productoras y el personal técnico. También hay ejemplos de máquinas industriales, instrumentos de medición, o modelos con finalidad didáctica. Todos estos rasgos, y muchos otros más, se revelan en la exposición desde la mirada irreverente de las bellas artes.
La exposición dispondrá de una página web que se irá enriqueciendo a lo largo de los próximos meses con nuevos hallazgos patrimoniales y tecno-artísticos conectados con la antigua Facultad de Ciencias de la Universitat de València. En el periodo de vigencia de la exposición está previsto un ciclo de conferencias organizado por el Instituto Interuniversitari López Piñero alrededor de temas principales de arte y ciencia, siguiendo así la línea de reflexión desarrollada en la anterior VI Matinal d’Història i ensenyament de les ciències de febrero de 2020. La exposición también servirá como actividad formativa complementaria dentro del marco del Máster de Historia de la Ciencia y Comunicación Científica, dentro del cual se realizan proyectos expositivos de recuperación de patrimonio científico. Todas estas actividades se pueden seguir a través de la página web del Institut Interuniversitari López Piñero y las redes sociales (@IILP_UV).
Fuente: UV