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Diseñan un sistema robótico asistencial para la terapia del habla y lenguaje

Mejorar el tratamiento de la dislalia, trastorno que provoca la pronunciación incorrecta de fonemas, es el objeto del sistema robótico asistencial diseñado por el doctor en Informática de la Universidad de Alicante (UA), Eldon Glen Caldwell. Se trata de una plataforma que integra un robot con una aplicación para dispositivos móviles que, además de incrementar la efectividad terapéutica en dislalia fisiológica, orgánica y funcional, facilita el trabajo remoto y presencial de los profesionales reduciendo los costes para los usuarios y pacientes.

Esta tecnología, ya validada y testada con pacientes y terapeutas reales, está indicada para personas con desórdenes de articulación y dislalia no severas, que requieren una baja supervisión o terapias de baja o media complejidad. “Usuarios con autismo, Síndrome de Down o dislalias por derrame cerebral que pueden ser tipificadas”, explica Eldon Glen Caldwell.

Ventajas

El potencial de la plataforma robótica desarrollada ha quedado evidenciado tanto en la validación experimental como en los testimonios de usuarios y tutores. “Experimentalmente se ha comprobado que el uso de la plataforma, así como de la aplicación para dispositivos móviles, mejora la efectividad terapéutica hasta en un 11,3 % en diez semanas con un 95% de confiabilidad estadística. A partir de la quinta semana de uso se presentan cambios estadísticamente significativos en los grupos que usan la tecnología sin restricción de tiempo”, apunta el doctorando de la UA.

Según los propios usuarios, la plataforma es amigable, fácil de usar y flexible para los pacientes, accesible desde cualquier lugar y no sólo en sesiones presenciales con el terapeuta. En este sentido, señala el investigador, “los costes asociados a la presencialidad se podrían reducir al menos en un 50%”.

En los últimos años ha crecido la investigación en aplicaciones robóticas y creación de aplicaciones informáticas para dispositivos móviles con propósitos terapéuticos. En este sentido, el sistema robótico diseñado por Eldon Glen Caldwell integra el uso de un robot físico con un emulador virtual, único en estos momentos en el campo de la terapia del habla y lenguaje y, específicamente, en dislalia funcional, fisiológica y orgánica. Entre otras, este sistema aúna múltiples tecnologías como reconocimiento de voz integrado, un arquetipo robótico para facilitar la relación “humano-robot”, y una completa programación y control de movimientos físicos del robot.

Contexto

Este sistema forma parte de la tesis de Eldon Glen Caldwell, dirigida por los profesores Miguel Ángel Cazorla de la Universidad de Alicante y José María Cañas de Universidad Rey Juan Carlos, que acaba de defenderse en formato ‘online’ debido a las restricciones impuestas por el Covid-19 y calificada con un sobresaliente. Surge para dar respuesta al tratamiento de trastornos del habla y lenguaje ya que la prevalencia mundial de afecciones que requieren terapia relacionadas con dislalia fisiológica, funcional y orgánica en la infancia permanece entre un 8% y 9% (OMS, 2011).

Según datos de la Organización Mundial de la Salud, en 2015, el 37% de las personas que superaron un incidente relacionado con enfermedades cardiovasculares, sufre algún tipo de dislalia o trastorno de la articulación relacionados con las habilidades del lenguaje o del habla (OPS, 2014).

“Es importante continuar trabajando en este tipo de sistemas para romper restricciones de tiempo en la ejecución de estrategias terapéuticas del habla, reducir costes –en especial para beneficio de poblaciones socialmente vulnerables-, aumentar la productividad de los profesionales por medio del uso de ambientes virtuales, así como para promover en los pacientes la interacción con robots de una forma lúdica”, insiste el doctor de la UA Eldon Glen Caldwell.

El investigador de la UA ha realizado parte del trabajo en su país de origen, Costa Rica. “Aparte del excelente trabajo en equipo con mis directores de tesis Miguel Ángel Cazorla y José María Cañas, debo agradecer la colaboración multidisciplinar con Carlos Morales, Emilia Solís, Silvia Soto y Adriana Jones en la validación funcional y experimental de la plataforma en la Universidad de Costa Rica y el Centro de Educación Especial de Heredia”, finaliza.

Fuente: UA