La empresa PLD Space, ubicada en el Parque Científico de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche, ha finalizado, tras dos años, la primera campaña de ensayos de su motor cohete de combustible líquido. Después de esta primera fase, la compañía continuará con nuevas pruebas que le permitirán ultimar el diseño definitivo de su motor cohete de calificación de vuelo. Es decir, el diseño del motor que se integrará en ARION 1, el primer cohete de la empresa cuyo lanzamiento está previsto para finales de 2018.
Hasta la fecha, la start up ha realizado los ensayos con un motor cohete denominado TEPREL Demo. Este es un modelo calorimétrico, desarrollado para demostrar la estabilidad de la combustión, así como para adquirir información relevante de funcionamiento como presiones y temperaturas, empuje y consumo de propelente en diferente régimen de empuje. Asimismo, este motor ha permitido a la empresa conocer y determinar las mejores secuencias de arranque y apagado de motores cohete de combustible líquido KeroLOX, una tecnología que nunca había sido desarrollada con fines comerciales. Todas estas pruebas se han llevado a cabo en el banco de ensayos que la compañía ha construido en el Aeropuerto de Teruel.
Estos tests se han realizado dentro del programa Tecnología de Propulsión Española para Lanzadores (TEPREL), un proyecto que el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) aprobó a la empresa. Este programa comenzó en junio de 2015 y tras docenas de ensayos en diferentes campañas, PLD Space ya está preparada para el siguiente salto tecnológico: probar un nuevo motor cohete regenerativo, TEPREL-A. Este motor cohete emplea queroseno y oxígeno líquido como propelentes, del mismo modo que su motor predecesor. Como novedad, en este nuevo modelo el queroseno fluye a través de la cámara de combustión para enfriar las paredes y reducir el intenso calor generado durante la combustión. Esta práctica se emplea en la industria de propulsión espacial aunque nunca antes había sido desarrollada en España. Gracias a este sistema, el motor cohete podrá funcionar durante dos minutos, a través de la generación de 32 kilonewtons a máximo empuje, tiempo necesario para enviar ARION 1 y su carga de pago hasta el espacio.
Fundada en 2011 por Raúl Torres y Raúl Verdú, PLD Space es la empresa de microlanzadores espaciales con más apoyos institucionales de Europa. Hasta la fecha, la compañía ha recibido el apoyo de la Comisión Europea, así como de diferentes instituciones nacionales como CDTI, la Empresa Nacional de Innovación Sociedad Anónima (ENISA), Institut Valencià de Finances (IVF) o SUMA Teruel. Asimismo, PLD Space trabaja conjuntamente con la Agencia Espacial Europea (ESA) en el marco del programa de futuros lanzadores, conocido como Programa de Preparación para Futuros Lanzadores, y en un proyecto llamado Liquid Propulsion Stage Recovery (LPSR).
La compañía ilicitana está respaldada, además, por varios inversores privados y por la empresa multinacional española GMV, responsable del desarrollo de la aviónica, del guiado, navegación y control (GNC) y de la telemetría de los lanzadores de PLD Space. Desde la participación de GMV como inversor y socio tecnológico, la start up aeroespacial ha crecido exponencialmente y ha pasado de contar con cuatro empleados a un total de 23. Además, GMV da soporte en la labor de desarrollo de aviónica con 12 miembros adicionales. Todo el equipo trabaja conjuntamente en el desarrollo de los principales subsistemas de los lanzadores ARION 1 y ARION 2.
ARION 1 contará con una única etapa y será el primer cohete de la compañía. PLD Space trabaja para poder incluir en éste el hardware y software necesario para la exitosa recuperación de esa etapa, que incluye paracaídas y otras tecnologías de aerofrenado que podrían ser directamente exportables al lanzador orbital ARION 2. Tras este primer cohete, la empresa abordará el desarrollo de su segundo lanzador, que situará satélites de hasta 150 kg en órbita terrestre.