Diversas investigaciones han estudiado la capacidad antibacteriana de la leche humana frente a algunos patógenos, pero hasta ahora no se había analizado esta capacidad frente a la bacteria Cronobacter sakazakii, causante de infecciones neonatales con consecuencias fatales en los recién nacidos. Tres investigadoras de la Universidad CEU Cardenal Herrera (CEU UCH) de Valencia acaban de publicar en la revista americana de lactancia Journal of Human Lactation el primer estudio a nivel internacional que analiza esta propiedad. Las profesoras Sandra Fernández Pastor, Mari Carmen López Mendoza y Dolores Silvestre Castelló, de los Departamentos de Ciencia y Tecnología de los Alimentos y de Farmacia de la CEU UCH, son las autoras de la investigación, que determina también las condiciones óptimas de manejo y conservación de la leche humana para reducir el riesgo de contaminación por Cronobacter sakazakii.
Según explica la profesora de la CEU UCH, Sandra Fernández Pastor, “cada vez es más frecuente que las madres deban extraerse la leche y conservarla refrigerada para seguir alimentando con ella a sus hijos más allá del periodo de baja por maternidad, por lo que deben guardarla refrigerada o congelada. También han aumentado los bancos de leche humana en hospitales, especialmente para alimentar a bebés prematuros con leche de madres donantes que se congela para su conservación y es sometida a distintos tratamientos previos a su administración. En nuestras investigaciones en este ámbito, analizamos las condiciones óptimas de tratamiento de la leche humana para evitar riesgos de contaminación y garantizar que se mantienen todas sus propiedades, incluidas las antimicrobianas”.
No más de tres días refrigerada
En este último estudio, que acaban de publicar en Journal of Human Lactation, el equipo de investigadoras de la CEU UCH ha analizado las propiedades de la leche humana frente a la bacteria Cronobacter sakazakii, todavía no estudiadas. Y también las condiciones óptimas de manipulación y tratamiento para que esta propiedad se mantenga tras su extracción. “Recientemente se han detectado casos de infección por esta bacteria en bebés que habían tomado leche humana previamente conservada. De ahí la necesidad de estudiar las condiciones óptimas de manejo y tratamiento para evitar el riesgo de contaminación por esta bacteria, que hemos determinado también en este mismo estudio”, destaca la profesora de la CEU UCH, Sandra Fernández Pastor.
Los resultados revelan que la conservación en frigorífico a 4ºC no debe prolongarse durante más de 72 horas. Y la congelación entre -18ºC y -20º también debe limitarse al máximo en el tiempo para garantizar las propiedades de la leche humana frente a la bacteria estudiada. “Estos resultados pueden contribuir a mejorar los protocolos de conservación en bancos de leche humana de hospitales en todo el mundo, ante la falta de un protocolo internacionalmente validado todavía. Y también pueden facilitar el buen manejo por parte de las madres en periodo de lactancia que tengan que extraer la leche y conservarla para alimentar a sus bebés”, destacan las profesoras de la CEU UCH autoras de la investigación.
Muestras de leche de madres donantes
El estudio se ha realizado sobre muestras de leche materna donadas por 29 madres lactantes de la Comunidad Valenciana y Murcia, para comprobar su capacidad antibacteriana frente a Cronobacter sakazakii antes y después de haber sido sometida a diversos procedimientos: conservada en refrigeración durante 72 horas, conservada en congelación durante uno, dos y tres meses, pasteurizada y sometida a tratamiento global de banco de leche humana, que incluye la aplicación de varios de estos tratamientos. En este último caso, se realizó el análisis con y sin adición de fortificante tras la aplicación del tratamiento global. La comparación de la presencia de la bacteria en las muestras de leche materna antes y después de ser sometidas a distintas condiciones de conservación ha dado lugar a las recomendaciones para preservar mejor su capacidad antimicrobiana natural.
El Grupo de Investigación en Nutrición Humana y Seguridad Alimentaria para la Salud de la CEU UCH, que dirigen las profesoras Mari Carmen López Mendoza, del Grado en Veterinaria, y Dolores Silvestre, del Grado en Farmacia, y del que forma parte la investigadora Sandra Fernández Pastor, estudia los biocomponentes y los efectos en sus propiedades cuando la leche se dona y se conserva en bancos de leche humana en hospitales, con el objetivo de contribuir a la mejora de sus protocolos de tratamiento. Los estudios de este equipo investigador han sido publicados en revistas científicas internacionales como International Dairy Journal, Maternal and Child Nutrition o Journal of Pediatric Gastroenterology and Nutrition.
Una parte de la investigación ahora publicada en Journal of Human Lactation fue premiada en el X Congreso Español de Lactancia Materna, celebrado el pasado año por la Asociación para la Promoción e Investigación científica y cultural de la Lactancia Materna (APILAM) entre las 173 investigaciones presentadas en formato póster.
Más información sobre el artículo Stability of the Antimicrobial Capacity of Human Milk Against Cronobacter Sakazakii During Handling, en la revista americana de lactancia Journal of Human Lactation.
Fuente: CEU UCH