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Desarrollan un entorno de realidad virtual 3D para diagnosticar antes el autismo y facilitar el tratamiento

Investigadores de la Universitat Politècnica de València (UPV) y de los Centros de desarrollo cognitivo, Red Cenit, han presentado T-ROOM, un nuevo entorno inmersivo de realidad virtual 3D que reduce el tiempo en el diagnóstico y facilita el tratamiento del autismo. T-ROOM recrea situaciones del día a día familiar en un entorno virtual. Las sesiones duran media hora y a los niños se les estimula visual, auditiva y olfativamente, se les coloca una pulsera para medir su actividad electrodermal y unas gafas para hacer un seguimiento de la mirada.

Alternativa al diagnóstico clásico

T-ROOM es el primer proyecto a nivel mundial que utiliza la Inteligencia Artificial (IA) y la Realidad Virtual (RV) para conseguir un diagnóstico y un tratamiento más eficaz y preciso del Trastorno de Espectro Autista (TEA).

Según las últimas investigaciones clínicas sobre el TEA, uno de los mayores problemas actuales en cuanto al tratamiento es la gran diversidad en cuanto a los síntomas que presenta una persona con TEA, lo que conlleva a una nueva era de la “deconstrucción” al afirmar los clínicos que “no existe el TEA, existen personas con TEA”.

Para ello, T-ROOM recrea situaciones del día a día familiar en un entorno virtual. Las sesiones duran media hora; en ellas, a los niños se les estimula visual, auditiva y olfativamente; se les coloca una pulsera para medir su actividad electrodermal –valor de gran interés para el diagnóstico del autismo- así como unas gafas de Eye Tracking que permiten realizar un seguimiento de la mirada.  Además, se analiza con cámaras y técnicas de Inteligencia Artificial los movimientos corporales del niño y avisa de posibles alteraciones del movimiento (estereotipias), asociadas al Trastorno del Espectro Autista (TEA).

“T-Room surge ante la necesidad de ofrecer a los niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA) y a sus familias una alternativa para reducir el tiempo de diagnóstico y que a su vez sirva como entorno terapéutico de intervención”, destaca Mariano Alcañiz, director del Instituto I3B de la UPV.

Fuente: UPV