El cáncer de mama se considera el tumor más frecuente en la población femenina y la primera causa de muerte por cáncer en la mujer. La Organización Mundial de la Salud considera esta patología como un problema importante de salud pública, llegando a ser uno de los cánceres más frecuentes en los países desarrollados. Con motivo del Día Mundial Contra el Cáncer de Mama, 19 de octubre, la profesora del Departamento de Enfermería de la Universidad de Alicante (UA), Carmen Solano, recupera la voz de tres afectadas en el artículo La fortaleza de la mujer frente al cáncer de mama.
La profesora de la UA ha realizado un estudio basado en entrevistas en profundidad para comprender las experiencias vividas por mujeres que han padecido cáncer de mama a través del estudio de sus relatos. El análisis de los discursos, señala Solano, lleva a afirmar que a pesar de que las mujeres que padecen cáncer de mama comparten preocupaciones y experiencias similares, el afrontamiento de las mismas y el proceso experimentado es individual, único e irrepetible.
En este proceso, los profesionales de enfermería juegan un papel relevante. “Su actuación implica un conocimiento más profundo de la enfermedad, no sólo de las secuelas físicas producidas por la propia patología y los tratamientos aplicados, sino que, además, deben prestar atención a las respuestas emocionales que aparecen en las distintas fases de la enfermedad ofreciendo el apoyo y la atención necesaria en cada momento”, explica la profesora del Departamento de Enfermería de la UA.
El resultado del trabajo de Solano pretende ayudar a las enfermeras y enfermeros a conocer y comprender mejor la enfermedad desde la visión de quienes la padecen. “No debemos olvidar que el objetivo principal de la disciplina es el ser humano, conformado por los cuidados tanto en la salud como en la enfermedad y el fomento de la misma. La complejidad y la propia naturaleza multidimensional del ser humano va a determinar un tratamiento holístico por parte de los cuidados de enfermería”, insiste.
Como señala Carmen Solano en su artículo, la mujer es considerada como pilar básico en la estructura familiar y social. “Por tanto, el diagnóstico de esta enfermedad específica de la mujer implica una ruptura en la vida diaria, no solo a nivel personal sino también a nivel familiar y social, apareciendo así una nueva situación que requiere la necesidad de crear importantes reajustes a todos estos niveles”.
El análisis de los relatos apunta que el momento del diagnóstico se percibe como algo traumático a pesar de que en algunos relatos mostraban síntomas de malestares previos en la mama. “No piensan que esta enfermedad te puede afectar a ti, es una enfermedad de otros. Surgen múltiples dudas y cuestionamientos acerca del proceso de la enfermedad. La respuesta emocional individual se ve condicionada a las diferentes experiencias previas con la enfermedad acompañada del propio bagaje cultural de cada individuo”, detalla la profesora de la UA.
El cáncer de mama supone una vivencia muy profunda cargada de sentimientos: la negatividad hacia la propia enfermedad, la alteración de la propia imagen corporal, la angustia, la desesperación y la incertidumbre son algunas situaciones por las que la persona que la padece debe afrontar creando estrategias apropiadas a cada proceso.
Incidencia en España
Según datos reciente recopilados por la investigadora de la UA, en España se diagnostican unos 26.000 casos al año, representando el 30% de todos los tumores del sexo femenino, asociándose a edades medias y adultas siendo su máximo entre los 45 y los 65 años. Tanto el número de casos como las tasas de incidencia aumentan lentamente debido principalmente al envejecimiento de la población y a un diagnóstico cada vez más precoz.
Aproximadamente, 1 de cada 8 mujeres tienen riesgo de padecer cáncer de mama a lo largo de la vida. En cuanto a la distribución geográfica se observa una gran variabilidad estableciéndose así importantes diferencias entre comunidades. Por ejemplo, en Cataluña la tasa de incidencia es de 83,9 casos /100.000 habitantes, mientras que la media nacional se sitúa en 50,9 casos / 100.000 habitantes.
Con respecto a la mortalidad por cáncer de mama, “en España podemos afirmar que es de las más bajas con respecto a otros países, fallecen unas 6000 mujeres al año, siendo la edad media de fallecimiento de 66 años”, apunta Solano. “La tasa de supervivencia promedio a 5 años de las personas con cáncer de mama es del 90 %”, añade.
Mientras que el número de casos y las tasas de incidencia aumentan debido al envejecimiento y la detección precoz, la otra cara de la moneda muestra un acusado descenso en la mortalidad ocasionado, principalmente, por la mejora de los tratamientos y por la estandarización en los procesos de detección temprana de la enfermedad.
Artículo completo La fortaleza de la mujer frente al cáncer de mama.
Fuente: UA