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Segundo Ríos y Vanessa Martínez participan en el Inventario Español de los Conocimientos Tradicionales Relativos a la Biodiversidad

Dos investigadores de la Universidad de Alicante, los botánicos Vanessa Martínez Francés y Segundo Ríos Ruiz, han participado en la realización de los tres volúmenes que componen la fase II del Inventario Español de los Conocimientos Tradicionales Relativos a la Biodiversidad, publicado por el Ministerio de Agricultura, y Pesca, Alimentación y Medioambiente (MAPAMA) y en el que ha trabajado un equipo de más de 70 expertos y 40 instituciones que incluye a biólogos, antropólogos, agrónomos, farmacéuticos o lingüistas. Los científicos, pertenecientes al Instituto Universitario CIBIO (Centro Iberoamericano de la Biodiversidad), forman parte del Grupo de investigación Biodiversidad y biotecnología aplicadas a la biología de la conservación de la UA.

El Inventario Español de los Conocimientos Tradicionales Relativos a la Biodiversidad se ha basado en la recopilación de conocimientos ecológicos tradicionales previamente publicados que son relevantes para el uso sostenible y conservación de la biodiversidad. Esta segunda fase completa la primera, de un solo volumen, publicado hace ahora unos dos años. Segundo Ríos ha destacado el valor de esta publicación, de la que afirma “esta es una obra magna por la cantidad de información recopilada y por haber sabido unir a más de doscientos investigadores de Etnobotánica, Etnobiología y Etnografía de toda España”.

Cinco investigadores de la Comunidad Valenciana han participado. Junto a los dos de la UA han trabajado Conchita Obón, de la Universidad Miguel Hernández, y Pablo Ferrer y Emilio Laguna, del Servicio de Vida Silvestre de la Generalitat Valenciana, Centro para la Investigación y Experimentación Forestal (CIEF). Entre los cinco han realizado fichas propias y también revisado todos los contenidos que afectan al ámbito de la Comunidad Valenciana de todas las demás fichas elaboradas por otros autores. Todos ellos formaban parte del Grupo de Investigación en Etnobiología, Flora y Vegetación del Sureste Ibérico. Este grupo de trabajo contaba también con la participación de expertos de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y la Universidad de Murcia (UM) como José Fajardo (UCLM), José García Botía (UCLM) y coordinado por Diego Rivera (UM) y Alonso Verde (UCLM).

La segunda fase del Inventario Español de Conocimientos Tradicionales relativos a la Biodiversidad es una base de datos que recopila y organiza los saberes seculares vinculados a la biodiversidad, trasmitidos mediante la tradición oral y que son el resultado de la adaptación del hombre sobre el medio donde vive. La elaboración de esta segunda fase se ha basado en la recopilación de conocimientos ecológicos tradicionales previamente publicados que son relevantes para el uso sostenible y conservación de la biodiversidad. Esta segunda fase del Inventario forma parte del Inventario Español del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad y está compuesta por tres tomos; recoge 707 fichas de plantas abordando un total de 760 especies. Esta información se suma a la aportada por la primera fase del Inventario. Casi 3.000 especies de plantas con conocimientos tradicionales asociados, cerca de la mitad de la diversidad florística española. Más de cien obras de referencia han sido desgranadas, analizadas y sus datos introducidos en este repositorio con el fin de facilitar la información a todos los interesados. El botánico de la UA apunta la excelente coordinación y cooperación que se ha dado entre todos los científicos implicados en el proyecto. “La labor personal de Manuel Pardo de Santayana, profesor de la Universidad Autónoma de Madrid y coordinador general del proyecto, ha servido para unirnos en esta tarea colectiva”, afirma.

La publicación saldrá en breve en formato papel y estará disponible en el Servicio de Publicaciones del Ministerio; no obstante, ya se pueden consultar los diferentes tomos en formato pdf, accesible a través de la web del Ministerio de Agricultura, y Pesca, Alimentación y Medioambiente, la Fase I; la Fase II, Tomo 1; la Fase II, Tomo 2; y la Fase II, Tomo 3.

La importancia de esta recopilación viene justificada por el Convenio de Naciones Unidas sobre la Diversidad Biológica de 1992, en el que se reconocía jurídicamente la importancia de los conocimientos tradicionales para la gestión sostenible de la biodiversidad. Posteriormente, la Ley de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad recogía esta filosofía del Convenio y avanzaba aún más en su desarrollo, estableciendo una definición concreta que da carácter normativo al concepto de conocimiento tradicional e identificando un mandato claro para las Administraciones Públicas, consistente en preservarlo, fomentarlo y divulgarlo, cometido que se cumple ahora con la realización del Inventario Español de Conocimientos Tradicionales relativos a la Biodiversidad.

Como complemento, el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente presentaba hace unos días en Madrid este proyecto e inauguraba, en la sede central del Ministerio, la exposición divulgativa El inventario español de los conocimientos tradicionales relativos a la Biodiversidad que se ha preparado anexa al proyecto impreso y que circulará por toda España, dentro de la labor de difusión de los conocimientos recogidos en el Inventario. La muestra recorrerá distintos puntos del territorio nacional como parte del programa de exposiciones itinerantes del Centro Nacional de Educación Ambiental (CENEAM) del Ministerio.

Tras la publicación de los cuatro volúmenes (Fase I v1; Fase II v1, v2 y v3) “en este momento estamos trabajando en una ampliación del proyecto para incluir no solo las plantas silvestres, sino también las cultivadas, de las cuales estamos corrigiendo las fichas que formaran parte del primer volumen”, ha declarado el botánico de la UA Segundo Ríos. Para poder contar con toda la información publicada disponible se ha realizado un Repositorio con todas las publicaciones etnobotánicas, etnográficas y etnobiológicas, evaluando el contenido de las obras e incluyendo solo aquellas que cumplían con los estándares científicos.

Fuente: UA