La empresa Aisoy Robotics ha firmado un acuerdo de distribución con la empresa North American Learning Robotics (NALR). A través de este, la compañía se convierte en el distribuidor oficial y exclusivo de los productos Aisoy en Estados Unidos. NALR cubrirá con los productos de Aisoy los huecos de mercado y las necesidades especiales que aparecen en su zona de influencia. Una de estas necesidades es el tratamiento de niños diagnosticados con Trastorno del Espectro Autista (TEA), un campo donde los robots Aisoy están demostrando el valor añadido y la mejora de la calidad de vida que pueden aportar los robots a estos niños y a sus familias.
Tal y como señala el CEO de Aisoy, José Manuel del Río, “el crecimiento de las personas con autismo es exponencial, sin embargo, no hay muchas herramientas que ayuden a este colectivo ni a sus terapeutas. Desde Aisoy Robotics y NALR estamos comprometidos con la ayuda a estos y otros colectivos con necesidades desarrollando programas específicos para ellos”. Para ello, los robots emocionales de Aisoy ofrecen una experiencia de ocio educativo que favorece el desarrollo de la creatividad y de las capacidades de los jóvenes. Son robots sociales que tienen como objetivo transformar la manera en la que los niños aprenden jugando. Son capaces de crear un vínculo afectivo con el niño basándose en las emociones y en un comportamiento personalizado para cada uno de ellos.
“Los productos de Aisoy son sofisticados, permiten jugar aprendiendo ̶ señala la CEO de NALR, Lisa Armstrong ̶ también ofrecen herramientas visuales para aprender a programar y desarrollar la capacidad de resolución de problemas de forma mucho más sencilla y eficaz que otras plataformas”. Por su parte, del Río destaca la relevancia de este acuerdo, ya que supone un salto internacional fuera de la Unión Europea. Además, el director de Aisoy añade que “nuestros robots ofrecen capacidades emocionales que no ofrece ningún otro robot de consumo a precios accesibles. Nuestro objetivo es que la robótica emocional sea eficaz y llegue a la mayoría de niños”.
Fuente: PCUMH